Torazo...

Cavenaghi ya no es un Torito. El nuevo líder y ¿capitán? clavó un doblete y River levantó un 0-3 contra Nacional.
No hay edad para el gol. De hecho, Fernando Cavenaghi fue goleador del fútbol argentino con apenas 18 años (Clausura 2002). Pero aquél era un Torito. Ahora el 9 es un torazo. A pesar de que aún no comenzó la competencia oficial, Cavenagol ya se está convirtiendo en el líder del nuevo River a fuerza de contundencia. Ayer el delantero metió dos goles y así evitó una derrota del equipo de Almeyda en el amistoso ante Nacional de Montevideo.
La mañana había arrancado mal para River. Porta puso el 1-0 de penal y luego, ya en el segundo tiempo, aumentó de cabeza. Sosa convirtió el tercero. Recién en los minutos finales se produjo la reacción de River, que empezó con un zurdazo de Sánchez desde afuera del área (capturó un rebote y le dio de primera). Después llegó el turno de que Cavenaghi demostrara toda su capacidad goleadora. Primero la metió de penal y sobre la hora clavó el empate con su especialidad: recibió un pase fino de Sánchez y definió mano a mano con Muñoz. Contundente.
Los goles del Torito (corrección: Torazo) fueron lo más positivo de la mañana en el Monumental. El partido fue a puertas cerradas para la prensa, aunque según lo que pudo averiguar Olé el equipo del Pelado fue superado en el juego durante la mayor parte de los 80 minutos que duró el amistoso. Almeyda paró un 4-4-2 con varios titulares y algunos casos raros. Por ejemplo, jugó Abecasis de lateral derecho (Ferrero no participó de ninguno de los dos partidos y Vella estuvo en el segundo turno), Sánchez se movió de doble cinco y Affranchino fue el carrilero por derecha. En la izquierda el DT ubicó a Bordagaray, y el Chori esta vez no se paró como enganche sino como acompañante de Cavenaghi en ataque.
Obviamente, la dupla siempre se entiende casi de memoria, pero cuando el Chori se para de punta debe retrasarse demasiado y entonces el 9 queda un poco aislado. Por eso es que el DT viene ensayando bastante la variante de ubicar a Domínguez como enlace y sumar a Funes Mori para tener más agresividad en los metros finales.
Cavenaghi no suele participar tanto del juego porque Almeyda le pide que se quede metido entre los centrales rivales. Pero cuando el Torito la toca siempre marca diferencias, sobre todo si la pelota le queda en el corazón del área. Eso, sumado a su identificación con la camiseta de River, lo hacen cada vez más líder del operativo retorno a Primera. Y también candidato a ser capitán. Es un torazo...