sábado, 16 de abril de 2011

"Siempre es especial"

Pavone piensa en Gimnasia y admite que no se trata de un partido más por sud diez años en Estudiantes. "Viene después del superclásico", avisa el Tanque. "Es lindo verse en las tapas de los diarios por más que llegue un momento en el que ya te acostumbrás. Yo las colecciono para que cuando Bruno crezca las pueda ver". Mariano Pavone se babea por ese enano que le saca una sonrisa cada vez que vuelve a su casa. Cada gol, cada grito, va acompañado al beso en el tatuaje que justamente dice "Bruno", su único hijo. Y los festejos con la camiseta de River son los que lo llevan a las primeras planas. Como también le pasó muchas veces cuando jugaba para Estudiantes. Fue el hombre que le dio el título del Clausura '06 en la final frente a Boca, aunque al día siguiente fue la foto de Verón con la copa la que se lució. Pero hubo un día que nunca podrá olvidar, por ese gol y por haber sido figura del clásico platense más recordado: el famoso 7-0. Aquella tarde le convirtió por primera vez en Primera a Gimnasia y mañana buscará agrandar su cosecha frente al Lobo, un rival diferente para él. "Pasé diez años en Estudiantes y para mí siempre es especial enfrentarlo. Jugué un montón de veces en Inferiores, en Reserva y en Primera", comenta el Tanque, sin ánimo de calentar el ambiente previo de su visita al Unico. "Es un partido que tiene otro sabor, aunque viene después del superclásico", aclara y saca a relucir el hincha de River que lleva adentro. El goleador, el hombre que le dio el triunfo el sábado al equipo de Jota Jota, tiene más que claro que no será para nada bien recibido por la hinchada de Gimnasia. Igual, prefiere no hablar demasiado del tema para que no se lo malinterprete y alguna frase, sin desearlo, levante la temperatura de este choque fundamental para la lucha por los promedios. Y por más que todos los fanáticos de Estudiantes estarán empujando su botín derecho cada vez que tenga la pelota en la mira, el Tanque prefiere hablar de las cualidades de este River que llegó a la punta. "A mí me gusta cómo estamos jugando, por algo llegamos ahí arriba. No somos un equipo que defiende y apuesta al error del rival o a un contraataque. Al principio podía ser raro ver un solo delantero, pero los del medio se suman todos al ataque", infla el pecho y fiel a su técnico, prefiere no marearse en la altura: "No hay que perder de vista nuestro primer objetivo, gracias a eso alcanzamos la punta".

No hay comentarios:

Publicar un comentario