"Si mi hijo acá no es feliz, me lo llevo"

Miguel Funes Mori, padre de Rogelio, consideró que se está criticando en exceso a su hijo y pidió mayor paciencia de parte del público de River para con el jugador, quien está pasando por un mal momento como futbolista. En diálogo, también recordó que Passarella rechazó una oferta más que importante por su hijo y quizá no vuelve a recibir una así, especialmente en esta coyuntura.
"Yo estuve reunido con Passarella, tengo códigos pero hasta cierto puntos. Hubo una oferta, no la quiso River porque Passarella entendió que iba a a valer mucho más. Quizá uno deja pasar el tren y se te fue. Hoy por ahí mi hijo no vale ni 200 pesos. ¿Qué pasa si ocurre lo mismo que con Buonanotte, que valía 30 millones y lo terminaron vendiendo por cuatro millones?", afirmó Funes Mori.
Luego comentó, "futbolísticamente, con la mano en el corazón, lo veo bien. Muy bien por los movimientos que hace, por cómo pica al vacío. Le falta, como le falta a Pavone, a Canales, a Fabbiani y a todos los delanteros que trajeron. River aún no entendió que tiene que traer jugadores por afuera".
"Me interesa que la gente y el hincha de River aliente a mi hijo como siempre lo alentaron. No puede ser que algunos vayan a la cancha a insultar a un solo jugador o a algunos. Rogelio tienen una hermanita de 8 años y otra de 18. La más chiquita va a un colegio en Olivos, y sus compañeritos la cargan todo el tiempo. Le están haciendo mucho daño a mis hijos".
También confesó, aA Funes Mori lo están matando, están destruyendo a un pibe de 20 años que está pasando por un mal momento, lo están haciendo pelota. Después del Superclásico, llegó y se sentó en el sillón y no dijo nada. Ayer, también, todo el día en el sillón, yo no sabía qué decirle. Ahora tiene que ir al psicólogo para que lo ayude. Parece que todos los partidos que perdió River los perdió él. No puede jugar si ya lo están puteando desde el tunel".
Para finalizar, agregó, "por ahí digo cosas en caliente y me puedo equivocar, pero yo a mis chicos los tenía felices allá. Yo si acá no es feliz, me lo llevo, juegue al fútbol o no. Yo lo que quiero es ver a mi hijo feliz, eso es lo más importante para mí".