Consciente de que es uno de los emblemas para la gente de River, el volante central de 36 años sabe que la chapa no servirá de nada si el equipo no obtiene resultados positivos para pelear por el título y, en consecuencia, engrosar el promedio.
Si hay algo que distingue a los líderes, es su visión de futuro, su conocimiento para proyectar diversas situaciones y adaptarse a las circunstancias que se pueden presentar en el corto, mediano y largo plazo. Matías Almeyda no se considera una persona con liderazgo, pero entiende que River debe asumir esta temporada con mucha responsabilidad y eso queda en claro cuando sus palabras de hace casi dos semanas encajan con lo que sucede ahora, tras la primera caída en el Torneo Apertura 2010.
"Todos somos conscientes del promedio, pero también sabemos que si apuntamos al campeonato, una cosa nos sacará de la otra. Para nosotros son todas finales, sin verso, y los primeros partidos de estos torneos cortos son los que marcan el camino. Si errás al comienzo, después se te va a complicar. Por supuesto que miro cuántos puntos achicamos e hincho por los que juegan contra nuestros rivales", expresó el Pelado.
A pesar de que todavía le sobra cuerda para tener un rendimiento destacado en la alta competencia, Almeyda piensa como técnico y no quiere que ningún detalle quede librado al azar. "Es fundamental cada entrenamiento, el cuidado personal, la concentración en los partidos, ser positivo en el grupo, hay que ir sacando ventajas en las pequeñas cosas para después lograr la gran ventaja", analizó, compenetrado con las necesidades de River.
Por supuesto que la premisa de Cappa es tener la pelota con criterio, pero el Pelado prioriza sumar: "Buscamos jugar bien porque sabemos que por esa vía tendremos más posibilidades de ganar, es el mensaje de Angel y coincido, pero mandan los resultados. Y cuando ganamos sin jugar del todo bien, sacamos cosas positivas. El primer concepto es jugar, pero si no se puede jugar, está la lucha. Lo importante es que tiremos todos para el mismo lado, acá no te podés dormir en los laureles".
El Pelado, quien salió por primera vez en la tapa de la prestigiosa revista y logró el hecho inédito de ser el único deportista en 91 años de historia que además aparece en la contratapa a través de una publicidad, sabe que su voz no es una más en el plantel, pero no impone límites. "Tengo más experiencia, pero la palabra líder no me gusta, la vinculo a algo autoritario", aseguró, uno de los ídolos indiscutidos para los hinchas de River, quienes desean volver a festejar un triunfo ante Arsenal.
"Siempre jugué con un elástico, pero mi mujer me regaló este pañuelo y lo uso en la cabeza. Esta vincha me convierte en un samurai, es lo que siento interiormente, porque voy a una guerra, no a un partido de fútbol. Yo siento que voy a luchar para defender lo que algunos nos quieren robar. Un triunfo, la permanencia, lo que quieras. Cuando ajusto el nudo, me pasa algo raro por dentro", reveló Almeyda, sobre el famoso pañuelo negro.
Si hay algo que distingue a los líderes, es su visión de futuro, su conocimiento para proyectar diversas situaciones y adaptarse a las circunstancias que se pueden presentar en el corto, mediano y largo plazo. Matías Almeyda no se considera una persona con liderazgo, pero entiende que River debe asumir esta temporada con mucha responsabilidad y eso queda en claro cuando sus palabras de hace casi dos semanas encajan con lo que sucede ahora, tras la primera caída en el Torneo Apertura 2010.
"Todos somos conscientes del promedio, pero también sabemos que si apuntamos al campeonato, una cosa nos sacará de la otra. Para nosotros son todas finales, sin verso, y los primeros partidos de estos torneos cortos son los que marcan el camino. Si errás al comienzo, después se te va a complicar. Por supuesto que miro cuántos puntos achicamos e hincho por los que juegan contra nuestros rivales", expresó el Pelado.
A pesar de que todavía le sobra cuerda para tener un rendimiento destacado en la alta competencia, Almeyda piensa como técnico y no quiere que ningún detalle quede librado al azar. "Es fundamental cada entrenamiento, el cuidado personal, la concentración en los partidos, ser positivo en el grupo, hay que ir sacando ventajas en las pequeñas cosas para después lograr la gran ventaja", analizó, compenetrado con las necesidades de River.
Por supuesto que la premisa de Cappa es tener la pelota con criterio, pero el Pelado prioriza sumar: "Buscamos jugar bien porque sabemos que por esa vía tendremos más posibilidades de ganar, es el mensaje de Angel y coincido, pero mandan los resultados. Y cuando ganamos sin jugar del todo bien, sacamos cosas positivas. El primer concepto es jugar, pero si no se puede jugar, está la lucha. Lo importante es que tiremos todos para el mismo lado, acá no te podés dormir en los laureles".
El Pelado, quien salió por primera vez en la tapa de la prestigiosa revista y logró el hecho inédito de ser el único deportista en 91 años de historia que además aparece en la contratapa a través de una publicidad, sabe que su voz no es una más en el plantel, pero no impone límites. "Tengo más experiencia, pero la palabra líder no me gusta, la vinculo a algo autoritario", aseguró, uno de los ídolos indiscutidos para los hinchas de River, quienes desean volver a festejar un triunfo ante Arsenal.
"Siempre jugué con un elástico, pero mi mujer me regaló este pañuelo y lo uso en la cabeza. Esta vincha me convierte en un samurai, es lo que siento interiormente, porque voy a una guerra, no a un partido de fútbol. Yo siento que voy a luchar para defender lo que algunos nos quieren robar. Un triunfo, la permanencia, lo que quieras. Cuando ajusto el nudo, me pasa algo raro por dentro", reveló Almeyda, sobre el famoso pañuelo negro.
No hay comentarios:
Publicar un comentario