sábado, 30 de octubre de 2010

"Me voy a matar con tal de llegar al clásico"

El Keko Villalva se ilusiona con volver a lo grande ante el rival al que siempre le hizo goles. Está recuperado y sueña.
Si es cierto que el superclásico se mama desde la cuna, el Keko Villalva ya tiene pedigrí de cachorro alimentado a base de triunfos ante Boca. Su disco rígido guarda dos goles en sus primeros partidos en las Infantiles, otro doble festejo en el 5-1 de la Novena en la Bombonera, un tiro libre agónico en el empate de la Octava y una definición que valió un tricampeonato en la Séptima. El último episodio es más reciente: ocurrió el 20 de enero, en Mar del Plata, en un 3-1 de verano que lo volvió a encontrar como figura (de la Primera). ¿Será por todo esto que en el almanaque del Keko hoy se impone el partido posterior a All Boys? Sí.
"Quiero jugar el clásico, aunque sea el de Reserva", cuenta Daniel Alberto, con los ojos brillosos que llevan sus dos nombres passarellianos. No sólo sueña lo que sueña por tratarse de Boca. El Keko necesita borrar los últimos seis meses de su vida. Una fisura en una vértebra (a pesar de haber tratado de aguantar el dolor) lo alejó de la actividad y detuvo su incipiente carrera. Desde el 24 de abril no juega entre los grandes. Recién el último domingo sintió la adrenalina del regreso en el partido de la Reserva ante Racing. "Me sentí muy bien. El parate se me hizo interminable. Pero ahora estoy con todo", se embala el de Caá Catí.
Haciendo horas extras de fútbol, Villalva busca su nivel en la medida que ve que no guarda secuelas de la lesión. "Físicamente estoy bien. Me entreno como todos. Lo único que no puedo hacer son pesas", cuenta. "Hoy mi objetivo es ganarme un lugar en la Primera. Sé que debo trabajar día a día, tomar ritmo y demostrarle mis ganas al técnico". Son ganas sustentadas desde el aliento de los grandes, desde las palabras de Almeyda, desde la voz de quien le regaló hace mucho unos botines 39: "Ariel me pidió que me ponga las pilas para jugar como antes". ¡Qué más! A los 18 años, con 24 presencias en Primera y tres goles, Villalva avisa que está de regreso: "Y me voy a matar con tal de llegar al clásico".

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