Passarella tiene una nueva obsesión en estos días. Primero fue una obsesión por las atajadas de Juan Pablo Carrizo y, después, otra por los goles de Mariano Pavone. Ahora, mientras el plantel abandona Salta y regresa a Buenos Aires apenas entrada la mañana de hoy, el presidente de River viajará a Paraguay para tratar de definir la contratación del hombre que siempre quiso para reforzar la defensa: Adalberto Román, de Libertad. En la que sería su despedida del club gumarelo, el central marcó el sábado el primer tanto en el 3-0 ante Tacuary, que dejó a su equipo puntero.Por tierras paraguayas aseguran que está todo acordado entre los clubes y que la cifra de la que se habla es de 3.600.000 dólares. También se dice que River le compraría el 50% del pase y que sería la vidriera para que en una futura venta Libertad pueda obtener una buena ganancia. El jugador dejó en claro cuáles son sus intenciones: "El lunes (por hoy) se define todo. Si se da, bienvenido sea. Passarella es un grande del fútbol, una persona entendida en el tema, y eso me da más ganas de seguir luchando. Ya conversé con él varias veces por teléfono. Me comentó su interés por llevarme. Ahora todo es cuestión de Horacio Cartés (presidente de Libertad) y de Passarella".
Si todo depende del mandamás paraguayo, sus palabras son más que elocuentes: "El que está mirando a Román no es ningún bobo. Fue el mejor central que vi en Sudamérica y está obsesionado con él. Lo vamos a extrañar a Román. Está todo acordado".
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