En el día del debut de Juan José López, la alegría la tubo River. Con una defensa muy firme, un medio campo muy bien parado con Almeyda y Acevedo como figuras, y un ataque, con un Ortega sobresaliente y un Pavone que aguantó todas las pelotas que le tiraron.
Otro punto muy alto del Millo en el primer tiempo fue Roberto Pereyra, el juvenil desbordó todo el tiempo por el costado, y sin dudas, por ahi podría haber llegado el primero de River. La única que tubo Boca en el partido, fue una de Chávez sobre el final. No fue un partido sobresaliente, pero en este partido opaco, River sobresalió.
Ahora nos espera el San Lorenzo de Ramón, será un partido duro y sin dudas muy importante, para seguir sumando puntos y confianza. Pero... quien nos quita lo bailado. Y como se pudo ver en la cancha, no hay pastor que pare esta fiesta.
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